El dinero en efectivo es el principal medio de pago utilizado en los países miembro de la Unión Europea. De acuerdo a un estudio del Banco de España (BDE), «el 82% de los españoles rechaza la desaparición del efectivo».
Sin embargo, no todas las denominaciones se frecuentan de la misma manera. En particular, los billetes de 500 han empezado a desaparecer y, según datos del BDE, esta herramienta de intercambio alcanzó su mínimo histórico en 2022. Así, durante el último año la cantidad de ejemplares en circulación fue equivalente a una cifra de 5400 millones de euros, un 22% menos que la referencia anterior.
Por ello, en 2016 el Banco Central Europeo (BCE) ordenó la prohibición de la emisión de los billetes de 500. La normativa tiene como objetivo el seguimiento de actividades delictivas, como el blanqueo de capitales o fraude fiscal.
¿Qué sucederá con los billetes de 500 ahora?
En un comunicado oficial, el BDE ha explicado que los billetes de 500 mantendrán su valor. Lo que sucederá es que ya no serán acuñados.
De este modo, los billetes de 500 seguirán funcionando como moneda de cambio. Esto se debe a el BCE sólo prohibió su emisión por parte de los bancos centrales, pero no su uso.
¿Qué hacer con los billetes de 500 que tengo en casa?
La principal entidad bancaria española ha explicado en su página web que solo se pueden conseguir billetes de 500 euros en bancos, compañías de transporte de fondos u oficinas de cambio de moneda.
No obstante, hay quienes aún guardan algunos de estos billetes en casa. Para ellos, el banco subraya que «el hecho de que tengan curso legal significa que pueden usarse como medio de pago y depósito de valor, es decir, para comprar y ahorrar»
